La ví por primera vez en el YO-YO. Regordeta y blanca, linda y desenfadadamente expresiva, indudablemente para nosotros, que no teníamos idea de lo que significaba ser una líder política o social, ella lo era. En el ’75, desnudarse y hacer un show frente a muchos era aún un grave insulto institucional.
Yo ingresaba a mi escuela a las 7:45, por lo que pasaba con el 71 por Ovidio Lagos frente al Panamericano, a la madrugada o más precisamente una vez a la semana cuando hacía gimnasia en Newell’s bajándome en Guemes para esperar el 58, a la hora en que los cafisos esperaban a sus pupilas. En las mañanas oscuras de invierno aún brillaban entre la garúa los destellos del neón anunciando a ELSITA DIX y a RITA LA SALVAJE, ésta última, el ícono sexy rosarino, de la otra no se supo mas nada.
¿Por qué Rita en el Psiquiátrico?. Era un peligro para el órden establecido. Se deduce de sus palabras una nota de hace casi 20 años para la revista Humor.
Era una víctima más del sistema, ya había sido una víctima de su elección artística, rompiendo con los estamentos preestablecidos. No obstante eso, para mí, adolescente de 14 años, estar parado esperando el celeste 58, lento, distante, me permitía observar un mundo subterráneo, prohibido, la Sunchales sórdida de historias prostibularias, pero la Sunchales que albergaba a muchos trabajadores que se desplazaban en tren desde ciudades o pueblos cercanos y también esperaban un colectivo para ir a sus tareas diarias.
Era una ciudad sin tristeza, la estación, con una hermosa confitería del ferrocarril, que utilizaba la misma vajilla que en los trenes (en especial la de acero inoxidable), permitía desayunar, tomar un aperitivo o una merienda viendo el ir y venir de taxis y de gente de los trenes.
Recuerdo la inauguración de las fuentes iluminadas al costado del andén oeste, como el creativo sistema de proyección de publicidad sobre el ingreso izquierdo a los andenes. En los ‘70 la ciudad tenía el mayor índice de construcción de su historia, y tras de ello se movía todo el mercado: aberturas, materiales, pisos, sanitarios, pinturas, muebles, cocinas, calefones, electrodomésticos, muchos de ellos fabricados aquí mismo, de manera que todos podían darse el gusto de saborear las pizzas y cerveza de la chopería Santa Fe o comprar en La Favorita, caminar por calle Córdoba en los preludios de las primeras baldosas hexagonales y disfrutar, como yo, de un café con leche en Hobby (frente a La Fragata) Pigall’s o en El Telégrafo. Otros disfrutaban de la noche rosarina tomando un Old Smuggler, un Robert Bowns o para los mas sofisticados un White Horse, invitados por la bella chica trabajadora de una whiskería.
Ese era el mundo de Rita y de Rosario ésas eran las luces de colores de neón en la nublosa mañana invernal que adornaba nuestra adolescencia. Parte de nuestro mundo como lo eran también la regla de cálculo, los discos de Luiggi Tenco o de Tormenta en el Winco.
TEMA: RITA EN http://www.musikeiro.com.ar/letras.php?id=19802
PÁGINAS PARA VISITAR:
Pasión audiovisual. Mario Piazza. RosariARTE... "La salvaje: Rita, con el alma al desnudo", de Sergio García y Hugo Grosso... "La salvaje" es el retrato de un mito viviente de la historia rosarina y ...www.rosariarte.com.ar/contenidos/ index.php?op=nota&nid=3&pn=2 - 58k
Todotango - La Mesa del Café... la amistad ,alli tambien actuaba la famosa Rita la salvaje,y digo famosa porquepermanecio mas de treinta años sobre las tablas haciendo su espectaculo ...www.todotango.com/english/ cafe/respuestas.asp?id=181903&idf=36 - 37k
Yo ingresaba a mi escuela a las 7:45, por lo que pasaba con el 71 por Ovidio Lagos frente al Panamericano, a la madrugada o más precisamente una vez a la semana cuando hacía gimnasia en Newell’s bajándome en Guemes para esperar el 58, a la hora en que los cafisos esperaban a sus pupilas. En las mañanas oscuras de invierno aún brillaban entre la garúa los destellos del neón anunciando a ELSITA DIX y a RITA LA SALVAJE, ésta última, el ícono sexy rosarino, de la otra no se supo mas nada.
¿Por qué Rita en el Psiquiátrico?. Era un peligro para el órden establecido. Se deduce de sus palabras una nota de hace casi 20 años para la revista Humor.
Era una víctima más del sistema, ya había sido una víctima de su elección artística, rompiendo con los estamentos preestablecidos. No obstante eso, para mí, adolescente de 14 años, estar parado esperando el celeste 58, lento, distante, me permitía observar un mundo subterráneo, prohibido, la Sunchales sórdida de historias prostibularias, pero la Sunchales que albergaba a muchos trabajadores que se desplazaban en tren desde ciudades o pueblos cercanos y también esperaban un colectivo para ir a sus tareas diarias.
Era una ciudad sin tristeza, la estación, con una hermosa confitería del ferrocarril, que utilizaba la misma vajilla que en los trenes (en especial la de acero inoxidable), permitía desayunar, tomar un aperitivo o una merienda viendo el ir y venir de taxis y de gente de los trenes.
Recuerdo la inauguración de las fuentes iluminadas al costado del andén oeste, como el creativo sistema de proyección de publicidad sobre el ingreso izquierdo a los andenes. En los ‘70 la ciudad tenía el mayor índice de construcción de su historia, y tras de ello se movía todo el mercado: aberturas, materiales, pisos, sanitarios, pinturas, muebles, cocinas, calefones, electrodomésticos, muchos de ellos fabricados aquí mismo, de manera que todos podían darse el gusto de saborear las pizzas y cerveza de la chopería Santa Fe o comprar en La Favorita, caminar por calle Córdoba en los preludios de las primeras baldosas hexagonales y disfrutar, como yo, de un café con leche en Hobby (frente a La Fragata) Pigall’s o en El Telégrafo. Otros disfrutaban de la noche rosarina tomando un Old Smuggler, un Robert Bowns o para los mas sofisticados un White Horse, invitados por la bella chica trabajadora de una whiskería.
Ese era el mundo de Rita y de Rosario ésas eran las luces de colores de neón en la nublosa mañana invernal que adornaba nuestra adolescencia. Parte de nuestro mundo como lo eran también la regla de cálculo, los discos de Luiggi Tenco o de Tormenta en el Winco.
TEMA: RITA EN http://www.musikeiro.com.ar/letras.php?id=19802
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